La droga y la muerte

La droga es muerte, van juntas, se hacen compañia, son amigos de toooda la vida. Se conocieron de casualidad, fué en una ocasión alegre, distraida, casi una fiesta, allí fué donde se conocieron la muerte y la droga.
Andaban de juerga, como casi siempre, allí, en esos lugares de despreocupación, a donde se va en multitud de ocasiones. Como digo allí se conocierón, estabamos todos casi, casi alegres, nunca se puede estar alegre cuando se toman drogas, asi que estabamos en ese sentimiento entre dos aguas, bebiendo, bailando, desfasando, pasandolo bien, todo era cuasi perfecto, chicas, chicos, diversión....todo estaba bien y en su lugar, hasta que......
Alguien se puso pálido, se puso malo, fatal, taquicárdico, empezo a vomitar, "uuufff que mal!!"......"me encuentro raro"....."no sé que me pasa"....."estoy, estoy.....
Y ya, se murió, la droga y la muerte hicieron "migas", se conocieron, ya digo, de casualidad. Todo empezó así, desde entonces mucha ha sido la relación entre ellos dos. Droga y muerte, muerte y droga, vaya pareja más bien avenida,¡¡si todas fueran así!! no habría divorcios ni separaciones.
Todo esto me recuerda algo que aprendí cuando iba a la escuela;

La luna tiene dientes de marfil.
¡Qué vieja y triste asoma!!
Están los cauces secos,
los campos sin verdores
y los árboles mustios
sin nidos y sin hojas.

Doña Muerte, arrugada,
pasea por sauzales
con su absurdo cortejo
de ilusiones remotas.
Va vendiendo colores
de cera y de tormenta
como un hada de cuento
mala y enredadora.

La luna le ha comprado
pinturas a la muerte.
En esta noche turbia
¡está la luna loca!

Yo mientras tanto pongo
en mi pecho sombrío
una feria sin músicas
con las tiendas de sombra.

No sé que será más mierda si la muerte o la vida.